Skip to main content

Crónicas de San Pedro Alcántara - T01-P36

Crónicas de San Pedro Alcántara - T01-P36: Concurso para la escultura ecuestre del marqués del Duero, 01 Noviembre 2021

Descripción

Tras su muerte en gloriosa batalla, se abrió un concurso público para erigir la escultura ecuestre del marqués del Duero. De este hecho histórico y el artículo publicado por José Luis Melendreras Gimeno en Academia, Boletín de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, en el año 1992, hablamos en este nuevo Crónicas de San Pedro Alcántara.

Texto:

Manuel Fernández Valdivia, que escudriña en Internet la historia de San Pedro Alcántara, en agosto de 2014 envió al blog el artículo: La estatua ecuestre del marqués del Duero, en el Paseo de la Castellana de Madrid, publicado por José Luis Melendreras Gimeno en Academia. Boletín de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, en el año 1992.

Aunque está disponible en la página del Instituto Cervantes, Manuel Fernández reeditó el artículo incluyendo algunas fotografías del banco de imágenes del entonces Ministerio de Educación.

Resumimos:

El 30 de agosto de 1875, la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y el Ayuntamiento de Madrid, convocaron un concurso para levantar un monumento al marqués del Duero, fallecido en combate en junio del año anterior.

En las bases del concurso se especificaban algunas condiciones de la escultura. Que “el ademán revelara la decisión de un héroe y su semblante, la resignación de un mártir”, que jinete y caballo fueran representados con naturalidad velazqueña, buscándose un término medio entre el rudo realismo y el idealismo griego, o que el uniforme del militar fuese el sencillo uniforme de campaña y no el de gala de capitán general.

El ganador del concurso fue el escultor catalán Andrés Aleu Teixidor, que contó con la colaboración de Pablo Gibert Roig, autor además de los bajorrelieves que adornan el pedestal: uno con la entrada en Oporto del marqués del Duero en 1847 y otro con la escena de su muerte en 1874.

El resultado final, para algunos historiadores del arte, es de un perfecto equilibrio. El caballo presenta una anatomía correcta y el jinete se muestra hábil, sin gesticulaciones, en el momento de dirigir a su tropa, con el brazo extendido.


Texto original del historiador José Luis Casado Bellagarza, publicado en el Blog rosaverde.com, al cual agradecemos su colaboración. Edición y voz: Manuel Fernández Valdivia.

Puntuación

0.0/5 Rating (0 votos)
Crónicas de San Pedro Alcántara - T01-P36

Deja un comentario

Estás comentando como invitado.